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Los ejercicios para personas mayores deben incluir actividades de fuerza, equilibrio, flexibilidad y aeróbicas

Los ejercicios para personas mayores de Residencia Selegna se adaptan a las características de cada persona

La actividad física es beneficiosa para la salud y envejecimiento. Mantenerse activo ayuda a prevenir muchas enfermedades crónicas. Además se fortalecen los músculos y mejora el equilibrio y la flexibilidad. Si el ejercicio regular es bueno a todas las edades, realizar ejercicios para personas mayores puede ayudarles a mantener su salud y una buena calidad de vida.

Nunca es demasiado tarde para empezar a hacer ejercicio. Esa es una de las ideas que tratamos de transmitir en Residencia Selegna a nuestros mayores. Los ejercicios para personas mayores que programa nuestro terapeuta ocupacional siempre se adaptan a las características de cada uno, a sus gustos y a sus posibilidades. Y siempre vamos poco a poco, con ejercicios para personas mayores sencillos y básicos.

Estos ejercicios para personas mayores se agrupan en cuatro grupos de actividades:

• Actividades aeróbicas. Son ejercicios que aumentan la respiración y la frecuencia cardíaca. El objetivo es mantener sano el corazón, el sistema circulatorio y los pulmones. Además mejoran la condición física general. Estos ejercicios para personas mayores incluyen caminar a paso ligero, nada en nuestra piscina climatizada, hacer ejercicio en el gimnasio o jugar al golf en el campo de golf de Bétera, que está junto a Residencia Selegna.
• Actividades de fuerza. Son fundamentales para evitar la pérdida de masa muscular propia del envejecimiento, así como de la masa ósea. En el gimnasio de Residencia Selegna contamos con máquinas con algo de peso o de resistencia para poder hacer estos ejercicios.
• Ejercicios de equilibrio. Ayudan a prevenir caídas y nuestro terapeuta ocupacional les ayuda a adquirir destrezas que pueden incorporar a las actividades del día a día y les aporta seguridad.
• Ejercicios de flexibilidad. Son perfectos para estirar músculos y que sean más flexibles. En este grupo se incluyen actividades como la danza, el tai-chi, el yoga o los ejercicios en el agua que practicamos en nuestra piscina.

El objetivo de todos estos ejercicios para personas mayores ha de ser la salud y envejecimiento positivo. Esto se traduce en prevenir el deterioro físico asociado a la edad, prevenir enfermedades crónicas y accidentes cardiovasculares, mantener la movilidad y evitar o retrasar la aparición de una discapacidad.

Además, en Residencia Selegna sabemos que evitar el sedentarismo, además de prevenir enfermedades y caídas, también es muy positivo para el estado de ánimo de nuestros mayores. Por eso les animamos a practicar cualquier actividad en nuestro jardín, nuestro gimnasio, en nuestra piscina climatizada o en el campo de golf.

Todos los ejercicios para personas mayores de Residencia Selegna están controlados por el terapeuta ocupacional y cuentan con el respaldo del fisioterapia y del equipo médico y de enfermería. Así realizamos un programa de actividades adecuado a cada uno de nuestros mayores. Porque sabemos que si no se sienten cómodos y a gusto no serán constantes y abandonarán.

Por eso además de practicar ejercicio queremos que se diviertan y que lo encuentren atractivo. Porque así seguirán asistiendo a estas actividades y, sin darse cuenta, evitarán el aislamiento, el deterioro cognitivo y la depresión. Los ejercicios para personas mayores no solo cuidan de la salud y envejecimiento de nuestro organismo. También cuidan de nuestra salud mental y emocional.

En Residencia Selegna impulsamos un tratamiento terapéutico integral

El tratamiento terapéutico debe contar con la aprobación de nuestros residentes para que funcione

En medicina, un tratamiento terapéutico es el conjunto de medios dirigidos a la curación o alivio de las enfermedades y sus síntomas. Tiene una finalidad sanadora y aporta bienestar. Dos aspectos fundamentales para la salud y envejecimiento positivo de los mayores de Residencia Selegna.

Por eso, en Residencia Selegna impulsamos el tratamiento terapéutico integral. Este abarca, no solo el tratamiento de las enfermedades de nuestros residentes, sino también el cuidado de su salud física y mental. Porque es fundamental para la salud y envejecimiento mantenerse activos, reducir preocupaciones y miedos y encontrar alivio emocional.

¿Cómo lo hacemos? En primer lugar, contamos con un equipo de profesionales que conocen bien en el aspecto terapéutico de sus tareas. En segundo lugar, en Residencia Selegna organizamos actividades y tratamientos personalizados para cada uno de nuestros residentes. Y en tercer lugar, siempre contamos con la opinión y los deseos de nuestros mayores para que el tratamiento terapéutico funcione. Y si ellos no pueden expresar su voluntad, se trata con los familiares más cercanos.

• Médico y enfermería. Ellos son los responsables del tratamiento terapéutico dirigido a la salud de nuestros mayores. Controlan la medicación, analizan el aspecto físico, se encargan de diseñar la dieta adecuada si es necesario, coordinan la rehabilitación o la terapia ocupacional… Su objetivo es que la salud y envejecimiento de nuestros mayores sean de la mayor calidad posible.
• Rehabilitación. En las personas mayores, cuidar la movilidad es uno de los aspectos más importantes para mantener su independencia y su calidad de vida. Por ello el tratamiento de rehabilitación terapéutico va encaminada a reforzar músculos y huesos para evitar que fallen y aparezcan los problemas. Y si esos problemas aparecen, les ayuda a recuperarse más rápidamente.
• Fisioterapia. Un masaje terapéutico ayuda a eliminar tensiones y dolores que incapacitan. Además los ejercicios de fisioterapia ayudan a mantener las capacidades funcionales y la coordinación de movimientos. El ejercicio ofrece grandes beneficios, tanto físicos como mentales. Por eso en Residencia Selegna animamos a que nuestros mayores lo practiquen. Ya sea en nuestro gimnasio, en la piscina o paseando por el jardín.
• Terapeuta ocupacional. Una vez detectadas las necesidades de nuestros mayores, el terapeuta ocupacional diseña un plan terapéutico. Adaptado a las capacidades de cada uno para prevenir, mantener o mejorar la autonomía funcional. Desde entrenamiento de acciones relacionadas con la higiene y el cuidado de la imagen, hasta la estimulación cognitiva de los mayores, prestando atención a la mejora de la memoria y las habilidades sociales.

Estos son los servicios que más trabajan con los residentes de Residencia Selegna. Pero no son los únicos. Contamos con un psicólogo, para ayudarles a adaptarse a los cambios que lleva consigo el deterioro de la salud y envejecimiento. Además ayuda a la coordinación del tratamiento terapéutico, buscando siempre el bienestar del paciente. Otro servicio es el de cocina. Siempre está atento a todas las dietas específicas, para ofrecer menús sanos y de calidad que se adapten a cada residente.

En Residencia Selegna queremos que nuestros residentes sientan que su su bienestar no disminuye, sino que aumenta por estar con nosotros. Queremos que se sientan a gusto en nuestras instalaciones. Y confíen en que nosotros siempre les ofreceremos el mejor tratamiento terapéutico para que su calidad de vida no se vea amenazada.

Mejorar la calidad de vida es el objetivo del cuidado de ancianos con discapacidad

El cuidado de ancianos en Residencia Selegna va encaminado a mejorar su autonomía

A la hora de hablar del cuidado de ancianos con discapacidad tenemos que distinguir entre discapacidad física y discapacidad cognitiva o psíquica. Y sobre todo tener en cuenta que cada persona es diferente del resto y que ante todo hay que respetar sus deseos y preferencias.

Por ello lo primero que hay que tener en presente es la necesidad de explicarles bien las cosas y las razones por las que lo hacemos. De manera clara y sencilla para que si la discapacidad es cognitiva o psíquica la puedan entender. Y si la discapacidad es física para que sepan que esas atenciones van encaminadas a mejorar su calidad de vida.

Si existe alguna discapacidad cognitiva o psíquica el cuidado de ancianos debe ir encaminado a vigilar que cumplan con las rutinas de higiene, con la alimentación y medicación y con cierta actividad física y mental para ayudarles a retrasar el avance de la enfermedad. Salir a pasear o ir a fisioterapia, estar con amigos o familiares, acudir a un terapeuta ocupacional son algunas de las actividades que pueden ayudarle y mantenerle activo.

¿Y si la discapacidad es física? En ese caso, el cuidado de ancianos debe dirigirse a tratar ese problema. Y además asistirlo en aquellas actividades que no puedan hacer debido a la discapacidad. Por ejemplo, acompañarle al médico, ayudarle con las rutinas de higiene, con las comidas,… pero si puede hacer cosas, hay que dejarle que las haga él y el cuidador debe supervisar. Así no

Normalmente el cuidado de ancianos suele recaer en familiares. Pero llegado un momento, puede ser necesario dejar el cuidado de ancianos con discapacidad en manos de profesionales. Como los que tenemos en Residencia Selegna. Médico, servicio de enfermería, de fisioterapia y rehabilitación, psicólogo y el terapeuta ocupacional son los encargados de diseñar un completo programa de ejercicios y actividades dirigidas a mejorar la autonomía de los ancianos con discapacidad.

Desde talleres de estimulación sensorial y cognitiva, terapia ocupacional, manualidades, excursiones, terapia con animales o jardinería, hasta rehabilitación, gimnasia o natación, pasando por cursos de cocina o de internet. En Residencia Selegna creemos que una discapacidad, física o mental, no tiene porqué ser un freno para hacer cosas. Para ello nuestros profesionales organiza cada una de las actividades en función de las capacidades y salud de los residentes. Y tenemos en cuenta su opinión y sus deseos a la hora de programar esas actividades.

Además, en Residencia Selegna contamos con unas buenas instalaciones, con jardín adaptado, biblioteca, salas de actividades, piscina climatizada y gimnasio. Y junto a nuestra residencia se encuentra el campo de golf de Bétera, para los amantes de este deporte. En Residencia Selegna todo está pensado para que nuestros mayores se sientan como en casa. Y también reciban una atención personalizada, acorde a su situación para mejorar su calidad de vida. Porque ese el objetivo del cuidado de ancianos con discapacidad: que esa discapacidad no frene su independencia y sus posibilidades de seguir haciendo cosas.

La actitud Selegna es una manera de actuar para mejorar la calidad de vida de nuestros residentes

El objetivo de la actitud Selegna es que nuestros mayores sean felices, mantengan la ilusión y se sientan útiles

La actitud Selegna es una manera de entender el cuidado de nuestros mayores. Combinamos la asistencia médica y personal con el disfrute de la vida al aire libre y un completo programa de actividades. Nuestro objetivo es mejorar la calidad de vida de nuestros residentes.

En Residencia Selegna contamos con una serie de aspectos que hacen que esa calidad de vida sea lo más buena posible. Es una de las claves de la actitud Selegna, volcarnos con nuestros residentes. ¿Cuáles son el resto de las claves de la actitud Selegna?

• Querer es poder. Ese es uno de los lemas que forman parte de la actitud Selegna. ¿Quieres jugar al golf? Cerca de Residencia Selegna se encuentra el campo de golf de Bétera. Si quieres aprender a nadar, contamos con una piscina climatizada y especialistas que te ayudarán a dar las primeras brazadas. ¿Quieres recuperarte de una operación? Tenemos a un equipo de rehabilitación, enfermería y médico que te indicarán cómo hacerlo. Si quieres hacer ejercicio, tenemos un gimnasio para que puedas hacerlo…
• Mantenerse activo ayuda a un mejor envejecimiento. La clave para una buena calidad de vida de nuestros mayores es un envejecimiento activo. La actividad física reduce el riesgo de padecer depresión, retrasa el envejecimiento funcional y reduce el riesgo de sufrir ciertas enfermedades. Y es algo que tratamos de inculcar con la actitud Selegna. Además del gimnasio y de la piscina climatizada, también pueden pasear por el jardín. Contamos con un terapeuta ocupacional para ayudarles a que su mente siga despierta. Y tenemos una biblioteca y ordenadores para los que quieran aprender a manejarlos.
• Alimentación sana. Una alimentación sana es fundamental para una buena calidad de vida. Por ello, Residencia Selegna cuenta con su propio servicio de cocina, donde se preparan menús de calidad y se atiende a las dietas específicas.
• La familia, lo primero. Estamos a solo quince minutos de Valencia, con fácil acceso en autobús. Facilitamos la visita de los familiares y amigos y además contamos con el rincón de la videoconferencia para permitir el contacto visual con la familia, por muy lejos que estén.
• Las preferencias de nuestros residentes son lo más importante. A la hora de tomar decisiones, siempre tenemos en cuenta que es lo que prefieren nuestros mayores. Así se sienten implicados y notan que su opinión cuenta. Tratamos de ofrecer un servicio profesional y un trato humano.
• La calidad por encima de todo. Sabemos que dejar a un familiar en una residencia supone un importante esfuerzo económico, por eso tratamos de ofrecer la mayor calidad posible en todos nuestros servicios. Además, Residencia Selegna cuenta con una elevada proporción de personal por residente. Un personal que está altamente cualificado.

La actitud Selegna sobre todo consiste en que nuestros residentes se sientan queridos. Que no piensen que porque están en una residencia o porque han llegado a una edad ya se les ha acabado la vida. Queremos que sigan disfrutando de ella y que aprovechen cada momento y lo disfruten. Por ello todo nuestro equipo les anima a ser positivos, a mantener la ilusión y a sentirse útiles. Ello, unido a unas instalaciones de calidad y a un trato humano, hace que los mayores de Residencia Selegna se sientan a gusto con nosotros.

La demencia senil es un deterioro cognitivo producido por una enfermedad

La demencia senil es degenerativa y los síntomas se van agravando con el tiempo

La demencia senil es un término ampliamente usado para identificar un deterioro cognitivo de una persona mayor. Este deterioro hace que las actividades básicas sean difíciles de realizar por uno mismo y tengan que depender de otros. Sin embargo, hay que tener claro que en ningún caso es una enfermedad, sino que es una condición causada por diversas enfermedades como el Alzheimer, Parkinson o Huntington, entre otras.

Esto significa que no todas las personas mayores se verán afectadas por la demencia senil. Muchas llegan a esa edad en perfectas condiciones, tanto cognitivas como físicas, sin ningún síntoma de deterioro, más allá de cierta disminución de la velocidad de procesamiento mental o cierto déficit de memoria inmediata. En esos casos hay que prestarles más atención pero sin ir más allá.

Pero en los casos en los que el deterioro afecte de forma completa o parcial a dos o más capacidades del paciente, como la memoria, el lenguaje, la percepción, el juicio o el razonamiento, hay que acudir a un médico y ver cómo afrontar la situación. Porque la demencia senil es irreversible y de carácter degenerativa. Además, va unida a otras enfermedades.

¿Cómo puedo distinguir si es demencia senil? Antes de que presenten claramente los síntomas, la persona sufre un deterioro cognitivo leve que supone la dificultad para realizar varias tareas a la vez y la agilidad mental se ve disminuida. Conforme va avanzando, los síntomas se agravan:

–         Pérdida de habilidades sociales.

–         Cambios de personalidad.

–         Problemas para comunicarse y para recordar el nombre de objetos familiares.

–         Pérdida del sentido de la orientación.

–         Dificultad para memorizar.

–         Incapacidad para determinar la peligrosidad de sus acciones.

–         Cambios en el patrón del sueño.

–         Depresión.

–         En los casos más graves los mayores con demencia senil no pueden realizar actividades básicas, como comer, bañarse o vestirse. Además pueden no reconocer a familiares cercanos o entender el lenguaje.

El mejor tratamiento para la demencia senil es la prevención. Es aconsejable animar a nuestros mayores a mantener la mente activa y a realizar actividades que le ayuden a frenar el deterioro cognitivo. Además, es importante crear un ambiente de seguridad, para evitar que la persona se desoriente, pero sin que se sienta agobiado o anulado. En las primeras fases, el mayor todavía puede tomar decisiones. No hay que dejarle de lado o tratarlo como un niño. Lo más importante es que mantenga su calidad de vida y su dignidad todo el tiempo que pueda.

Y cuando la demencia senil esté más avanzada es conveniente acudir a un centro como Residencia Selegna para recibir la ayuda de profesionales. Quizá piensen que en casa estará mejor, pero llega un momento que esa situación es muy dura para el cuidador y para el mayor y hay que tener en cuenta que es lo más adecuado para que este reciba la mejor atención posible.

En Residencia Selegna contamos con un gran equipo de profesionales, especializados en enfermedades degenerativas, compuesto por médico, enfermería y terapeuta ocupacional. El médico y el servicio de enfermería controlan al mayor y el terapeuta ocupacional diseña actividades para que el deterioro cognitivo sea más lento.

También disponemos de un equipo de fisioterapia y rehabilitación para ofrecer un atención más completa. Además en nuestras instalaciones hay un gimnasio, piscina climatizada, jardín y cerca tenemos el campo de golf de Bétera. Así nuestros mayores pueden hacer ejercicio, adecuado a sus posibilidades, algo que también ayudará a ralentizar el progreso de la demencia senil. 

La artrosis en la personas mayores limita los movimientos y causa deformidad y dolor.

El ejercicio físico, una buena alimentación y una actitud positiva son fundamentales para afrontar la artrosis en las personas mayores.

Una de las enfermedades degenerativas más comunes es la artrosis en las personas mayores. El paso del tiempo puede provocar el desgaste del cartílago de las articulaciones. Esto produce el roce de los huesos, lo que causa dolor, deformidad y limitación de movimientos. Además de hinchazón, chasquidos en los huesos y rigidez. Principalmente afecta a las manos, articulaciones de carga como las rodillas y caderas y la columna vertebral.

El principal objetivo del tratamiento de la artrosis en las personas mayores va dirigido a controlar el dolor y reducir al máximo la incapacidad y la limitación funcional. La fisioterapia juega un papel muy importante para mantener la fuerza de las articulaciones y reducir la limitación de movimientos.

Es algo que tenemos muy claro en Residencia Selegna. Nuestro equipo médico, el servicio de enfermería y de fisioterapia y el terapeuta ocupacional diseña un plan de rehabilitación adaptado a las necesidades de cada paciente, para tratar la artrosis en las personas mayores. Este plan de rehabilitación se lleva a cabo en todas nuestras instalaciones, pero sobre todo en el gimnasio y en la piscina cubierta.

A menor actividad física mayor será el deterioro y la degeneración. Aunque los síntomas de la artrosis mejoran con el reposo es fundamental practicar ejercicio físico con regularidad. En Residencia Selegna animamos a nuestros mayores a qué hagan ejercicio, para mantener la fuerza muscular y la movilidad articular. Además el ejercicio ayuda a perder peso, lo que implica un menor sufrimiento articular, mayor agilidad y facilidad de movimientos.

Por otro lado, la hidroterapia (realizar ejercicios terapéuticos en piscina) guiada por nuestro servicio de fisioterapia es una medida paliativa muy efectiva para tratar la artrosis en las personas mayores. Esta terapia ayuda a mantener la movilidad de las articulaciones. Además, como no existe gravedad en el agua, la articulación no se sobrecarga al realizar las rutinas de ejercicios y se atenúa el dolor.

Unido a la actividad física, los masajes son otra herramienta para paliar los efectos de la artrosis en las personas mayores. Con ellos se consigue relajar y aflojar los músculos de la articulación, que suelen estar bastante contracturados y doloridos y así se reducen las molestias.

Y cuidar la alimentación. Primero para prevenir el sobrepeso. Y segundo porque hay alimentos que ayudan a mejorar la salud de nuestros huesos y articulaciones. Por ejemplo, los frutos secos crudos, el pescado y las legumbres. Son alimentos que aportan vitaminas y minerales beneficiosos para nuestros huesos.

Además, hay que enseñar a las personas mayores a convivir con la enfermedad y aceptar las limitaciones. Por ejemplo, evitando los movimientos que producen dolor y si es necesario usar bastones o muletas para reducir el peso que soportan las articulaciones y evitar caídas. O usar calzado cómodo para evitar posturas incorrectas. Y también hay que aprender a aceptar las deformidades que suelen aparecer. Enfrentar la artrosis en las personas mayores con una actitud positiva ayuda a que los tratamientos de rehabilitación sean más efectivos. Y que la calidad de vida de nuestros mayores se resienta lo mínimo posible.

El tiempo es fundamental en casos de ictus en personas mayores

El ictus en personas mayores afecta en gran medida a la movilidad. 

El cerebro va perdiendo neuronas de manera lenta y progresiva. Sobre todo en las personas mayores, sin que eso suponga un fallo de las funciones cerebrales. Es una simple limpieza de aquellas células enfermas. Sin embargo, un ictus en personas mayores supone una muerte súbita e inesperada de muchas neuronas en una zona determinada del cerebro. Saber actuar a tiempo puede paliar muchas secuelas.

Desde la Sociedad Española de Neurología y desde Protección Civil se han lanzado campañas con consejos para detectar los síntomas de un ictus en personas mayores y no tan mayores y actuar a tiempo. ¿Cuáles son esos síntomas?

• Cambios repentinos o pérdida gradual de consciencia.
• Falta de coordinación de movimientos.
• Alteraciones del tono muscular, sobre todo de la cara. Para comprobarlo, hay que pedir que enseñe los dientes, si solo mueve un lado de la cara o el movimiento es asimétrico es cuando el cerebro está afectado.
• Problemas de habla o al tragar.
• Pérdida de movimiento y fuerza en brazos y piernas.
• Confusión.
• Dolor de cabeza intenso y repentino.

Cualquiera de estos síntomas es señal de un ictus. Lo mejor que podemos hacer es mantener la calma, aflojarle la ropa para que pueda respirar bien y se encuentre cómodo y llamar al 112. Ellos te indicarán cómo continuar hasta que lleguen. La rapidez en la atención médica es fundamental para una mejor recuperación ya que para que se produzcan lesiones irreversibles en el cerebro deben pasar varias horas.

El ictus es la segunda causa de mortalidad y la primera entre mujeres. Además puede provocar graves secuelas como:

• Déficit de movimiento y motricidad.
• Afecta al lenguaje (afasia).
• Pérdida de automatismos y control de esfínteres.
• Pérdida de facultades mentales, especialmente la memoria, la capacidad de atención y de análisis.
• Déficit sensorial.
• Inestabilidad emocional.
• Trastornos del sueño.
• Ansiedad y depresión.

Estas secuelas suponen un reto para el paciente y también para los familiares. La recuperación de la autonomía y la mejora de la calidad de vida son los objetivos del tratamiento de ictus en personas mayores. Por ello es importante que el paciente intente llevar una vida normal: salir de casa y mantener su vida social ayudará a que el estado de ánimo no decaiga y es una buena manera de evadirse.

Además hay que seguir las pautas que indique el equipo médico. Y en este sentido la rehabilitación será fundamental para recuperarse de algunas secuelas. Sobre todo en casos de ictus en personas mayores. En muchas ocasiones el enfermo puede vivir en su propia casa, con un familiar para estar pendiente de él durante el periodo de recuperación, pero en otras puede ser necesario llevarle a alguna residencia.

Residencia Selegna goza de una gran reputación como centro de rehabilitación y lugar donde recuperarse de postoperatorios y problemas como un ictus en personas mayores. Contamos con un equipo médico formado por médico, enfermeros 24 horas (el servicio de enfermería está pendiente en todo momento de nuestros residentes), terapeuta ocupacional, fisioterapeuta y psicólogo. Ellos hacen una evaluación inicial del paciente para establecer que tratamiento seguir. Además en nuestras instalaciones disponemos de un buen gimnasio para la rehabilitación, piscina y jardín.

Así trabajamos los problemas de movilidad, que son los que más afectan a los casos de ictus en personas mayores. Con los tratamientos de gimnasia terapéutica y de fuerza muscular de Residencia Selegna conseguimos buenos resultados en la recuperación de estos pacientes. Además les ayudamos a adaptarse a su nueva situación. Así sabrán cómo actuar en el día a día fuera de la residencia.

Tener Parkinson no significa que el enfermo no pueda hacer cosas.

Es importante que el enfermo de Parkinson mantenga una vida activa y no estresarle.

El Parkinson es una enfermedad crónica. Nadie muere de ella, pero puede haber un descenso importante en la calidad de vida de los afectados por esta enfermedad. Por ello conocer sus síntomas, saber cómo cuidar a una persona con Parkinson es fundamental para ayudarlos y que su autoestima no decaiga.

Sobre todo, hay que mantener una actitud positiva ante la enfermedad. Tener Parkinson no significa que el paciente no pueda hacer cosas. Más bien al contrario. Se pueden seguir realizando muchas cosas, simplemente habrá que modificar algunas para adaptarlas a la enfermedad.

Al principio el mejor cuidado que se puede dar a una persona es el apoyo emocional. Ayudarle a adaptarse a la enfermedad, con el tratamiento médico, a organizarse para acudir al terapeuta ocupacional, a fisioterapia o al logopeda o eliminar las barreras arquitectónicas que puede haber en casa son diversas alternativas. También es importante animarle a que mantenga una vida activa. Así evitaremos que el enfermo de Parkinson caiga en una depresión, uno de los trastornos psicológicos más típicos de esta enfermedad.

Conforme la enfermedad va avanzado es cuando los problemas se hacen más graves. En los enfermos de Parkinson se ralentizan los movimientos y la expresión verbal. Pasan por momentos en los que se encuentra normal y otros en los que tiene mucho temblor o lentitud, no se expresan con normalidad y el rostro no tiene expresión. Pero no nos confundamos, entiende y comprende todo lo que ocurre a su alrededor.

Por ello es importante tener paciencia y no insistir en aquello que no puede hacer. Y evitar a toda costa estresarle dando muestras de impaciencia. En esos malos momentos hay que animarle a hacer ejercicio para disminuir la rigidez y la tensión, facilitar la realización de tareas y favorecer el descanso para recuperar fuerzas.

Además es muy beneficioso llevarles a centros de día o a residencias para mayores como Residencia Selegna. Si no para quedarse a vivir allí, sí para aprovechar nuestras instalaciones como centro de rehabilitación. En Residencia Selegna contamos con un servicio médico y un servicio de enfermería. También con terapeuta ocupacional, servicio de rehabilitación en nuestro gimnasio y de fisioterapia que pueden ayudarle con los síntomas del Parkinson.

Y mientras el enfermo esté con nosotros, el cuidador puede descansar y tener un tiempo para si mismo. Algo que no hay que perder de vista, porque tan importantes son los cuidados del enfermo como los del cuidador.

A todo ello hay que sumarle una serie de consejos para mejorar la calidad de vida del enfermo de Parkinson:

• Hay que animarle a hacer algo de ejercicio diariamente, pero antes valora sus fuerzas y capacidades.
• Fijar objetivos fáciles y realistas.
• No insistir en aquello que no puede hacer.
• Implicarle en la toma de decisiones que le conciernen.
• Distribuir las tareas y actividades del día en etapas cortas sucesivas para facilitar su realización.
• Uno de los problemas más típicos del Parkinson es la incontinencia. Es conveniente que la estancia donde el enfermo pase más tiempo esté cerca del baño.
• Adecuar la casa para evitar caídas.
• Y sobre todo, estar atentos a los síntomas para valorar si hay un agravamiento y hay que avisar al médico para ajustar la medicación.

Además, no hay que olvidar que no estás solo. Los especialistas (médico, psicólogos, terapeuta ocupacional…) están para ayudarte a entender la enfermedad y buscar la mejor manera de llevarla. A ello se unen las asociaciones de enfermos de Parkinson y familiares, que son un apoyo fundamental.